No puedo consolarte, porque yo no tengo consuelo,
no puedo volver a mirarte porque me traicionaste,
lo entregue todo por ti,
mi alma, mi espacio, mi tiempo, mi trabajo,
pensé que el amor perduraría,
que me amabas pese a todo,
que por encima de los problemas,
de todo lo que tuvimos que pasar
había amor,
amor del bueno, del de verdad.
Luego me dí cuenta de que no había nada,
te deslumbró mi belleza y
te sentiste atraido hacía mí
aprovechaste mi juventud,
mi paciencia, mi inocencia mi cobardía.
Me pregunto, si alguna vez
has pensado esto,
Tu vida ha sido más maravillosa que la mia,
El glamour, los viajes, el dinero,
lo has tenido todo
y a mí que me has dejado,
sólo el recuerdo y la tristeza del abandono.
Es una herida que ya cerro,
pero a veces debo acariciarla
por si vuelves,
por si algún dia nos cruzamos,
para que nunca se me olvide lo que me hiciste,
para que no vuelva a caer,
para que no tenga otra vez que pasar por la misma
penitencia
y me pregunto, si vuelves, qué haré..............
nada, te pagaré con la indiferencia que tu me has dado.